Tras este sacrificio que hizo con su culo, boca y vagina, Laura Palmer que es una minita no tan conocida en el mundo del porno pero después de esto no se merece más que nuestro respeto y admiración, una rubia hermosa y que termina tragando leche de muchas texturas y sabores, ella parece algo triste y desolada pero no se dejen engañar por las apariencias, lo disfruta como nadie solo que anda concentrada en sentir al máximo cada pichula que la está penetrando, más de una treintena de psicópatas sometieron a brutales embestidas a esta dulce mina, es impresionante la resistencia que tuvo la weona y eso sin contar el tiempo de los cortes que han hecho al video! Vivir con esta mina debe ser el paraíso.